Antiguamente, las comunidades estaban plenamente delimitadas y el sentimiento comunitario estaba garantizado por la conciencia de compartir un mismo espacio físico. Progresivamente, las sociedades modernas han ido des-ubicando al ciudadano de su anclaje físico y permitiendo que éste opte por redes personales geográficamente dispersas. En el presente libro se analiza la influencia que las nuevas tecnologías de la información y comunicación (teléfono móvil, SMS y, sobre todo, Internet) han tenido sobre las comunidades modernas y cómo la dicotomía real/virtual ha de ser reinterpretada ante dicha influencia. También se propone que el ciudadano actual sea concebido como nodo o punto dinámico de intersección entre las diferentes redes sociales interactivas (físicas, virtuales o hibridaciones de ambas) a las que éste pertenece.
