De Sigmund Freud (1856-1939), el creador del psicoanálisis, se han escrito infinidad de
estudios que van desde el vilipendio hasta el elogio desmedido. Sin embargo, pocas veces
se ha meditado acerca de su auténtica personalidad. Ni hombre “decadente” ni héroe impoluto,
Freud exige, para ser descubierto, la misma objetividad científica que aplicó él a
quienes llegaban a consultarlo en busca de tranquilidad espiritual. Vicios y pasiones convivieron
en él y fueron, como en cualquier otro ser humano, las fuerzas decisivas que lo
llevaron a penetrar en el estudio del recóndito mundo del inconsciente.
En esta obra, Erich Fromm revela, mediante la aplicación de procedimientos psicoanalíticos,
la compleja personalidad de Sigmund Freud.