Cervantes escribió el Quijote con la intención de parodiar los libros de caballerías, que consideraba simples sartas de disparates. Para lograr su propósito, ideó la historia de un hidalgo que enloquece de tanto leer las inverosímiles hazañas de héroes como Amadís de Gaula, y, al igual que los caballeros andantes, se echa a los caminos para ayudar a los menesterosos. En compañía del afable y crédulo Sancho Panza, don Quijote participa en una serie de aventuras que, más que engrandecer su figura, provocan la hilaridad del lector. Sin embargo, el Quijote es mucho más que una simple novela humorística, pues constituye una lección magistral sobre la grandeza y la miseria de la condición humana. De la mano de un héroe que obra como un loco pero que a menudo razona con admirable cordura, Cervantes nos revela la importancia de los ideales, nos ilustra sobre el valor de la libertad y la justicia y nos advierte de que no siempre es fácil distinguir la realidad de la apariencia.
Este volumen ofrece una selección muy representativa del Quijote que incluye diez capítulos de la Primera parte y otros diez de la Segunda. La anotación del texto, a cargo de Silvia Iriso, aclara todas las dificultades que la obra presenta para el lector de hoy, mientras que el prólogo, obra de Gonzalo Pontón, trata con rigor y amenidad todos sus aspectos claves e incluye un resumen de toda la novela. La edicón contiene ilustraciones de diversos autores y épocas y se completa con una sección de actividades a cargo de Agustín Sánchez Aguilar.