Los juegos de mesa son parte inseparable de la historia y la cultura de la humanidad. Los juegos surgen como forma de en-tretenimiento y socialización, pero también como muera de re-presentar actividades de la vida cotidiana o de delimíiár clases y practicas sociales. A lo largo del tiempo, la oferta de juegos de mesa y las formas de editarlos han ido evolucionando, influidos directamente por nuestra manera de entender el mundo que nos rodea, Pero ha sido a partir de la década de los arios 90 del siglo XX cuando se ha producido la mayor transformación de la indus-tria de los juegos de mesa, con la popularización y el aumento de la oferta. En ese contexto de expansión, aparen nuevas propuestas para el estudio del juego de mesa. Un campo de investigación que, en un principio, había atraído la atención de una parte pe-queña de la academia, reivindicaba ahora su espada dentro de los gaine' studies, centrados principalmente, en lo digital, ha-ciendo gala de su característica diferencial: lo analógico. Apare-cen así lo que denominamos analog game studies. Desde entonces, la investigación sobre los juegos de mesa