Bingo y Rolly han oído decir a Bob que algún día le encantaría notar la arena de Hawái entre los dedos de los pies. Ni cortos ni perezosos, los cachorros se proponen viajar hasta la isla y traer un montón de arena para hacer feliz a su dueño.
Este sitio web utiliza cookies, tanto propias como de terceros, para mejorar su experiencia de navegación. Si continúa navegando, consideramos que acepta su uso. Más información